Nunca saqué tantos higos de la planta como en lo que vá de enero, es increible...si tuviera tiempo sacaría todos los días y preciosos.
Me dá mucha ternura descolgarlos, me recuerda que esa planta que plantó mi abuelo, ahora es mía.
Cuando era chica, los sacábamos de la misma forma, con un aparto que él fabricó,...que constaba de un palo largo que tenía en una punta una pinza...ponele...con un alambre que llegaba hasta la otra, con una especie de freno de bici para apretar,... y de esta manera, bajar la mayor parte de higos que quedaba más arriba.
Concluído esto nos los comíamos debajo y pelando uno a uno semajante manjar,....calentitos, recién bajados,...no comas muchos que te vá a doler la panza...
Bergamotas y ciruelas, mandarinas y naranjas de ombligo,..
Los Higos son los que maduran en el mes de mi cumpleaños, asi que por esos días ya me son tan familiares.
Saqué más de la cuenta pensando en algún dulce posible,.... y porqué no intentar con alguna tarta, no sin antes escribir esto después de tantos días de huevo...